La Guardia Civil ha desarticulado una red de tráfico de los llamados SARMs (Moduladores Selectivos de los Receptores de Andrógenos) que operaba en España a través de una página web. Se trata de unas sustancias que se anuncia como alternativa a los esteroides y que se emplean en ciertos contextos (el mundo del deporte y del culturismo, principalmente) para ganar músculo, pese a que su distribución y venta no está autorizada en España para este fin.
Qué son los SARMs
Los SARMs son fármacos actualmente en estudio para tratar el desgaste muscular, que puede a la vez ser resultado de muchas condiciones y un factor en el empeoramiento de las mismas. Con todo, cabe destacar que la mayoría de los estudios al respecto ni siquiera ha superado la fase I de los estudios clínicos, según apunta la escuela virtual de Ciencias del Ejercicio Físico G-SE.
De manera similar a los esteroides, los SARMs sensibilizan los receptores androgénicos (elementos de la célula que se activan ante la presencia de ciertos tipos de hormonas sexuales masculinas llamadas andrógenos) de manera que incrementan el efecto de estas hormonas. A diferencia de los primeros, no obstante, su efecto funciona para ciertos andrógenos y ciertos receptores concretos; de ahí el apellido ‘selectivos’.De manera similar a los esteroides, los SARMs sensibilizan los receptores androgénicos (elementos de la célula que se activan ante la presencia de ciertos tipos de hormonas sexuales masculinas llamadas andrógenos) de manera que incrementan el efecto de estas hormonas. A diferencia de los primeros, no obstante, su efecto funciona para ciertos andrógenos y ciertos receptores concretos; de ahí el apellido ‘selectivos’.
Este último punto es importante, ya que los andrógenos tienen efectos sobre muchos sistemas diferentes del organismo (como el reproductivo, el musculoesquelético, el cardiovascular…) lo que explica los variados efectos secundarios que pueden tener los SARMs.
Efectos secundarios graves
Por ejemplo, estos fármacos pueden llegar a producir efectos como hipertensión, erupciones cutáneas, cefaleas, toxicidad hepática, disfunción eréctil y problemas de visión. Además, si bien no se ha comprobado que esto suceda específicamente con el uso de SARMs, se sabe que la señalización de los receptores androgénicos puede contribuir al desarrollo de varios tipos de cáncer.
Junto a todo esto, debe tenerse en cuenta que los productos que se venden de manera ilegal a través de internet (a menudo en formato gotero, de ahí el nombre ‘gotas mágicas’) tienen riesgos añadidos por la falta de controles. En muchos casos, estos fármacos pueden contener concentraciones del principio activo diferentes a las especificadas en los etiquetados, o pueden contener otras sustancias dañinas.
Fuente: www.20minutos.es
